Los días como este la escritura me delata y me relleno de qués y cuándos. Me vuelvo inútilmente barroca, redundante en verdad y requetepesada. Las ideas se me enredan en algún sitio entre el pensamiento y la punta del lápiz y no puedo desprenderme entonces de la palabra imprecisa hasta que brota el garabato necesario.
Los días como este despiertan tontos y la cara se me pone caída como perro pachón y el ojo me tiembla con voluntad propia. Me pongo soñolienta y cansada y me vencen las ganas de huirme y no pensar. No sé entonces si se entra en la cocina o a la cocina; ni si un sonido indica o anuncia. No sé hasta que me vomito y descanso vacía.
Los días como este tienen cortina gris y se nublan los colores. Me vuelvo nostálgica en ellos y deseo que la ciudad gire y me lleve a París, o esconderme bajo las mantas y soñar la infancia, o caminar altiva con los labios pintados y la mirada ajena de quien se dirige a una cita importante.
Los días hoy espero desaparecer en alguna esquina, camuflarme en un portal o lanzarme al vacío, y permanecer oculta y suspendida como me siento, observando cómo mira la gente a la mujer que creen que soy.
Los días hoy mejor no estar.
Me voy.
14 comentarios:
Bueno: una ventaja de padecer días así de aquél lado del atlántico, es que París está... ¿a ocho horas?... y además sin pasaporte.
En cambio toda nostalgia de este lado del atlántico es peligrosa, más en una ciudad como esta que no conoce horizontes...
Saludos y colores.
la esponcromática
Pues benditos los días como éste si son capaces de sacar de ti tanta genialidad. Fantásticas palabras, belleza.
Un abrazo.
Izaskun, lo ha dicho rutunda y lapidaria Maribel,días como éstos son los que te hacen contemplar lo que la gente mira de la mujer que eres.
Independientemente de lo que podamos ver o no ver en este autoretrato, aquí hay literatura que al final de cuentas es lo que un lector, al menos yo, quiere leer: un texto literario.
Gracias por colgar el calendario y espero que vengan mas días como éstos para tí y para mi.
Un abrazo con el lápiz en la mano.
Sergio Astorga
Para ser uno de esos días que dices como hoy, estás bien sembrada, la verdad. No he notado mucho la diferencia... aunque, también, puede ser que éste no sea uno de mis días.
Besos, Izaskun.
Pues sí, Esponjis, puestos a poner ventajas esa es una. De cualquier modo las ciudades, como tantas otras cosas no están ya a distancia espacial ni temporal sino a la distancia que nos marca el dinero. (Sobre todo cuando estamos en una isla o en otros continentes, claro).
Gracias por el arcorirs.
Un abrazo con aroma de plátano.
Gracias por el hiperbólico comentario, Maribel. Mientras existan las palabras muchos días serán salvables.
Un abrazo.
Querido, Sergio, puestos a esperar a veces me conformo con que vengan más días de cualquier tipo pero en verdad los prefiero menos grises.
El calendario bastante he tardado en colgarlo por la torpeza informática que cultivo.
Un abrazo con la libreta abierta.
Izaskun
O puede, querido Dédalus, que todos los míos sean así de obtusos y entonces quizás mejor cerrar el kiosco. (Ahora se escribe con q, pero hay cositas de la edad que mantengo por lucir).
Un fuerte abrazo.
observando cómo mira la gente a la mujer que creen que soy...
...mientras tú permaneces a salvo.
Besos
Si, admirada Mega, de vez en cuando a salvo llorando por no ser lo que quieren o quiero.
Un beso
Mi querida, espero haber llegado a uno de esos días alegres, serenos, con apenas el recuerdo de aquellos otros días. Ojalá vinieras a Paris, seguro que nos meteríamos horas a platicar a la cocina, y se nos enredarían las ideas con la risa.
Pero ese vacío y ese dolor de la existencia tan cosidos a la piel, tan cocidos en el vientre...
Un abrazo
Cosido en el vientre,ese dolor, Miriam, bien lo sabes. No sé a qué día llegas, amanezco con lluvia y recuerdos de una tarde de llanto y miedo. Habrá cocina entre nosotras. Seguro.
Un abrazo requete sabroso.
Esos días Estos, que tan bien describes, creo que son días que a todos nos invaden de vez en cuando.
Son días en los que yo suelo desear mimetizarme en cualquier cosa d elas que me rodean...
Desaparecer, hasta que pasen
Un beso Izaskun
Exacto, mimetizarme es lo que deseo, dejar de verme y ser vista. Incluso dejar de ser.
Un beso, Pizarr.
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